lunes, 18 de mayo de 2009

Paz

Tuve que hacer 139 inmersiones antes de ver a mi primer whale shark. Tenía una especie de gafe: siempre que estaba enferma o en el barco de la tarde, los que habían buceado por la mañana lo veían. Sin embargo, mi suerte cambió. Ya he visto seis; cinco de ellos en los últimos cinco días. Ahora soy una especie de talismán: si voy en el barco, hay tiburón.

Y los amo. Y es un amor correspondido. Un romance, una historia, un affaire. Se me ilumina la cara cuando los veo. Siento mariposas en la barriga. Me pongo nerviosa. No puedo dejar de sonreir. Y ellos se acercan a mi. Me buscan entre la multitud y se aproximan. Juegan. Buscan el momento en el que estoy sola para aparecer. Me quieren en la intimidad. Y yo a ellos.

PAZ. No existe una palabra que los describa mejor.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

AHGGGGGGGGGG!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

QUE ENVIDIA!!!!!!!!!!!!

Yo también quiero... me alegro por ti. Sobre todo porque tu PAZ es parte de mi PAZ.

P.S: No crezcas Wendy, no comentas ese terrible error.

Besos Peter.

Olga Moya dijo...

No crezco. Me acabo de comprar una montaña de golosinas (y es verídico) para recordarme lo pequeña que soy. Y esta noche, a fañta de oso de peluche, voy a dormir abrazada a la almohada. No me chuparé el dedo pq me parece excesivo.

No crezcas tú tampoco.

Besazos.

Nemo dijo...

Olga!!! Me muero por nadar uno. Es mi sueño. Dime que me vas a llevar...

Nos vemos en Koh Tao :)